No hay nada más molesto que pasar noches en vela por el molesto zumbido de los mosquitos . Por no hablar de las picaduras y cosquillas. Los mosquitos parecen multiplicarse por la noche y desaparecer durante el día.
Por extraño que parezca, la antigua creencia de que los mosquitos prefieren la sangre dulce es parcialmente cierta. Es el alto nivel de dióxido de carbono lo que atrae a los mosquitos, que son capaces de percibir los cambios, especialmente cuando haces ejercicio.
Los mosquitos también se sienten atraídos por el olor del sudor, especialmente si hay altas cantidades de ácido láctico o amoníaco.
Cómo hacer una trampa para mosquitos
Necesitas:
- 50 gramos de azúcar
- 1 cucharada de levadura
- 250 ml de agua
- 1 botella de plástico
- tijeras
- una bolsa de plástico
- cinta adhesiva
Mezclar bien el agua, el azúcar y la levadura en un bol. Corta la botella de plástico por la mitad con unas tijeras. La boquilla de la botella será la tapa y será necesario darle la vuelta.
Vierta la mezcla en la botella y ciérrela con cinta adhesiva, luego envuelva la trampa en una bolsa de plástico y colóquela en la esquina de su dormitorio.
Con esta mini trampa para mosquitos que puedes hacer tú mismo, puedes pasar una noche tranquila y no volver a escuchar ese molesto zumbido.
