El laurel es una de esas plantas aromáticas que siempre viene bien tener en casa. No solo es útil en la cocina, sino que tiene muchas propiedades beneficiosas para nuestra salud. Sus hojas son un ingrediente fundamental de muchas preparaciones culinarias, pudiendo ser utilizadas para la preparación de tisanas e infusiones.

Si usted también compra hojas de laurel en el supermercado “según las necesidades”, probablemente le complacerá saber que cultivar un árbol de laurel en el balcón es posible y no es nada difícil de hacer.

A continuación enumeramos algunos trucos para tener una frondosa planta de laurel en el balcón y así evitar tener que comprarla en el supermercado.

1. Elección de la olla

La elección de la maceta en la que plantar el laurel es importante: no debe ser demasiado grande, de lo contrario la planta crecerá demasiado, pero tampoco demasiado pequeña, para favorecer el desarrollo de las raíces.

Para trasplantar la plántula de laurel comprada en el vivero, lo ideal es elegir una maceta de unos 50 centímetros de altura, preferiblemente de terracota. Asegúrese de que tenga orificios de drenaje.

2. Preparación de la tierra para macetas

Para favorecer el crecimiento y desarrollo de la planta de laurel, antes de colocar la tierra, vierte una capa de arcilla expandida o piedritas para facilitar el drenaje del agua y evitar que las raíces se pudran.

Inmediatamente después vierta el suelo, que puede ser universal. Es importante que sea rica en materia orgánica, y se puede enriquecer con un poco de humus o estiércol de lombriz.

3. Trasplantar la plántula de laurel

Retire la maceta de plántulas de laurel (la colocada por el vivero) con mucho cuidado de no dañar las raíces. Limpia un poco la tierra y pon la plántula en la maceta de terracota.

Una vez colocada la plántula, riégala con abundante agua.

4. Luz

Coloca la planta de laurel en semisombra: debe recibir un máximo de 4 horas de luz solar al día.

Sin embargo, la planta necesita luz indirecta, por lo que es perfecta para colocarla en el balcón.

5. Riego

Es importante no regar la planta de laurel con demasiada agua. Regar solo cuando la tierra se esté secando, agregando agua poco a poco hasta que salga por los agujeros de la maceta.

Riegue siempre temprano en la mañana o en la noche, antes de que la planta reciba el sol.

6. Colección

Para quitar las hojas de laurel, use unas tijeras esterilizadas y corte parte de la rama.

No corte las hojas individualmente, ya que esto puede dificultar el crecimiento del árbol. Cortar una rama entera propiciará el crecimiento de una nueva rama.